A medida que avanzas en tu trayectoria profesional, es inevitable que experimente periodos de duda sobre ti misma y miedo.

También, hay una probabilidad del 70% para todos los habitantes del planeta, de experimentar el síndrome del impostor. Ni siquiera las personas más exitosas están exentas de padecerlo.

Aunque, el grado y la frecuencia de estas experiencias no dependen sólo de ti, sino también del entorno al que estás expuesta. Para quienes experimentan miedo, duda de sí mismas o síndrome de la impostora, los pasos necesarios para superarlos también suelen ser diferentes.

Dudar de una misma puede convertirse en algo crónico, aunque también puede ser algo más leve.

El síndrome de la impostora está relacionado con las creencias limitantes, profundamente arraigadas de “no ser digna de…” o de que van a “descubrir que no eres capaz” o que eres un fraude.

Por este motivo, no hay soluciones rápidas para el síndrome de la impostora, aunque con la ayuda adecuada puedes aprender en un corto período de tiempo, empezar a gestionar los sentimientos y creencias de “impostora”.

Además, existen otras formas de miedo que pueden manifestarse de muchas maneras: algunas son literalmente paralizantes, mientras que otras son mucho más fáciles de superar.

Por eso es importante aprender la diferencia y no agrupar las respuestas, sentimientos y emociones de “todo el cuerpo” en la misma “etiqueta”.

Es importante identificar correctamente lo que sentimos y lo que experimentamos, como la duda sobre nosotras mismas, el síndrome de la impostora o cualquier otro miedo, para encontrar la ayuda y el acompañamiento adecuados.

Este próximo 11 de marzo, estaré ofreciendo un mini-workshop virtual: Supera el Síndrome de la Impostora. Atenta a mis redes, próximamente estaré compartiendo toda la información.